Dos relatos: El jorobadito y Las fieras

En El jorobadito (1933), su primer libro de cuentos, Roberto Arlt trata temas oscuros como el delito, la traición, la hipocresía y la crítica a la moral burguesa.
El narrador del cuento está encerrado en un calabozo por haber estrangulado a Rigoletto, el jorobadito del título. La sociedad interpreta el asesinato como la consecuencia de su locura y lo encierra en la cárcel.
La confesión sobre el estrangulamiento, escrita desde la cárcel, pretende justificar el asesinato como una especie de higiene social. La maldad del jorobado y la perversas relaciones familiares del asesino, son las razones que utiliza el narrador-asesino para justificar su bajeza moral.

En Las fieras, Robert Arlt se acerca con más intensidad al género negro a través de un largo monólogo ante la imagen fantasmal de su mujer ya fallecida, para explicarle el proceso de envilecimiento y degeneración en que ha ido cayendo.
Un relato narrado por el mismo criminal donde se responsabiliza de todos sus malévolos actos. Una confesión íntima que intenta quizá redimirse a través de la memoria de un amor perdido.