Ahora que no estás te puedo ver

«Observaba fascinada, cuando se ha presentado en mimente una frase de esas que dejabas apuntadas aquí y allí: “Las oportunidades son como los amaneceres. Si uno
espera demasiado, se lo pierde.” He sonreído mirando al cielo, que me ha devuelto tu sonrisa. ¡Egun on, ama!»

Así comienza Ahora que no estás, te puedo ver, de Beatriz Areta Cebrián, una colección íntima de cartas dirigidas a su madre, que constituyen una reivindicación de su esencia y su legado como mujer.

El libro invita a iniciar un viaje emocional, ofreciendo consuelo y entendimiento a quienes han perdido a su madre, mientras celebra la vida y la herencia de esa figura especial y única. Esta obra conmueve y reconforta, recordándonos que, incluso en su ausencia física, el
amor materno sigue siendo una fuente de inspiración y fortaleza. 

A través de esta exploración, las cartas se convierten en un testimonio de la profundidad del vínculo materno-filial.

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Ahora que no estás, te puedo ver trasciende lo personal para convertirse en un acto de
reconocimiento a la figura universal de la madre.